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Los datos del fondo parroquial que custodia el Archivo Histórico Diocesano de Santiago permiten reconstruir el árbol genealógico de las personas cuyos antepasados hayan nacido o fallecido en alguna de las 800 parroquias de la provincia de A Coruña que pertenecen a la diócesis compostelana.

La ingente cantidad de documentación, que está a disposición de los investigadores y de cualquier ciudadano que desee averiguar datos de su pasado familiar ha sido recogida, restaurada y catalogada por el Archivo Diocesano gracias a la colaboración que le viene prestando desde hace diez años la Diputación de A Coruña.

Esta ayuda, cifrada en 758.000 euros en sucesivas partidas del organismo provincial desde el 2001, y que este mismo mes se prevé incrementar en 72.000 euros más para continuar con una nueva fase, fue agradecida ayer de manera personal por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, y por el canónigo y director del Archivo Diocesano, Salvador Domato, al presidente de la Diputación de A Coruña, Salvador Fernández Moreda. Lo hicieron a través de una placa de reconocimiento en las dependencias del Archivo, situado en un lateral de San Martín Pinario, y el regalo de un libro editado expresamente con la reproducción de las partidas de nacimiento o de defunción de ilustres personajes coruñeses como María Pita -cuyo nombre completo era María Mayor Fernández Pita-, de Alfredo Brañas, Emilia Pardo Bazán, Rosalía de Castro o Alfonso Daniel Rodríguez Castelao.

Los registros parroquiales a salvo en este Archivo Histórico se remontan a mediados del siglo XVI, desde el Concilio de Trento. La relevancia histórica es aún mayor si se tiene en cuenta que los registros civiles no se crearon hasta 1870.

Demanda de los emigrantes

El arzobispo significó la importancia de que pueda acceder a este fondo «cualquier feligrés que quiera saber de dónde viene», porque, como también señaló, «tenemos la obligación de conocer nuestro pasado, por muchos motivos». De hecho, la mayor demanda de documentación por parte de particulares procede de emigrantes que buscan sus orígenes.

El trabajo de recogida, restauración y catalogación de este patrimonio documental lo lleva a cabo un equipo de siete expertos que desempeñan su labor bajo la dirección de Salvador Domato, quien agradeció el mecenazgo de la Diputación y la confianza en su trabajo, así como el hecho de que la institución «ha entendido nuestra tarea y el papel de la cultura a la hora de hacer país».

Fuente de información empleada: La Voz de Galicia