lunes, 19 de diciembre de 2011

Se han restaurado protocolos notariales del fondo del Ducado de Gandía en el Archivo Histórico de la Nobleza

Fuente de información: Página web del Ministerio de Cultura.

"El fondo del ducado de Gandia es uno de los siete ducados que se han identificado dentro de la Casa de Osuna. Es una fuente fundamental para el estudio de toda la zona de levante.

El Ducado de Gandia fue concedido por Fernando el Católico a Pedro Luís de Borja y Catanel en 1483, y tradicionalmente ha estado unido a los famosos Borgia. Se unió a la Casa de Benavente por herencia, a través de Francisco Alfonso Pimentel Borja, XI conde-duque de Benavente y sobrino de la XII duquesa de Gandia, quien murió sin descendencia en 1749. Más tarde, el título pasó a formar parte de la Casa de Osuna con el matrimonio de María Josefa Téllez-Girón, XII condesa-duquesa de Benavente, y Pedro de Alcántara Téllez-Girón, XI duque de Osuna en 1771.

Entre la documentación del ducado de Gandia se conservan más de 450 protocolos notariales de muy diversas dimensiones, fechados entre el s. XIV hasta el s. XVIII.

Los protocolos son libros registros en los que los notarios o escribanos copiaban las escrituras matrices de los negocios jurídicos, públicos o privados, a los que otorgaban su signo y con él la Fe Pública (garantía legal de veracidad).

Los protocolos dan un rico testimonio sobre la vida de la región en la que trabajaron sus titulares. En ellos encontramos documentación muy variada sobre casi todos los aspectos de la vida cotidiana: administración de bienes y rentas (cartas de poder, cuentas, inventarios de bienes, apeos de fincas), transacciones económicas (obligaciones, cartas de pago, arrendamientos, compraventas, censos), contratos de obras y servicios (contratos, encargos de obras de arte), asuntos judiciales (fianzas, cartas de perdón privado, nombramientos de procuradores, peticiones de excarcelación), esponsales (declaraciones de virginidad, dotes y arras, capitulaciones matrimoniales), vertiente caritativa y religiosa (fundaciones de obras pías, memorias de difuntos, capellanías) y últimas voluntades (testamentos, codicilos, particiones sucesorias)

Se identifican por el notario que los firma, según su categoría tendrá un distrito asignado o no, y las fechas en las que ejerció su actividad. Tiene formato de libro, siendo habituales las encuadernaciones de pergamino, y están escritos en lengua valenciana y latín.

En la actualidad, el mal estado de conservación en que se encuentran la mayor parte de ellos impide su consulta directa en sala, por lo que se ha emprendido su restauración a través de un proyecto que se irá abordando por fases debido al gran número de piezas sobre las que intervenir y la laboriosidad del tratamiento.

Este proceso de restauración incluye la digitalización del protocolo por parte de la Sección de Conservación. Por tanto, cuando finalice este proceso, la documentación estará disponible para su consulta en sala en formato digital, como método de conservación preventiva".

Podéis consultar aquí el tríptico.

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